its y condones

Los preservativos o condones son un método eficaz para prevenir embarazos no deseados y proteger frente a las infecciones de transmisión sexual (ITS), incluido el VIH. Utilizar un preservativo cada vez que se mantienen relaciones sexuales puede ayudar a reducir el riesgo de estos resultados. Además, los condones son una forma de protección cómoda y de fácil acceso que pueden utilizar personas de todas las edades.

Si te ha fallado el método de barrera y no has planeado una concepción, te recomendamos consultar en internet el precio del levonorgestrel, y pedirlo hasta la comodidad de tu hogar, o de donde te encuentres.

Hay varias razones por las que es importante utilizar condones

  • Prevención de embarazos no deseados: Los condones son un método anticonceptivo eficaz, con una tasa de fallos de alrededor del 2% cuando se utilizan de forma sistemática y correcta. Esto significa que pueden ayudar a prevenir embarazos no deseados y la necesidad de abortar.
  • Protección contra las ITS: Los preservativos proporcionan una barrera física que puede ayudar a reducir el riesgo de transmisión de ITS entre parejas sexuales. Esto es especialmente importante, ya que muchas ITS no presentan síntomas, por lo que las personas pueden no ser conscientes de que están infectadas.
  • Comodidad: Los preservativos están ampliamente disponibles y pueden adquirirse sin receta médica. También son fáciles de usar y se pueden llevar encima para utilizarlos cuando sea necesario.
  • Asequibles: Los preservativos son una forma de protección relativamente barata en comparación con otros métodos anticonceptivos y de prevención de ITS.

En general, el uso de condones es un aspecto importante del comportamiento sexual responsable y puede ayudar a protegerse contra los embarazos no deseados y las ITS. 

El condón y las ETS/ITS

El preservativo es la mejor forma de protegerse de la mayoría de las enfermedades de transmisión sexual (ETS). Deben utilizarse correctamente y cada vez que se mantengan relaciones sexuales. Pero incluso cuando se usan correctamente, los preservativos no protegen contra las infecciones que se propagan por llagas en la piel (como el herpes genital ) no cubiertas por un preservativo.