existe la alergia a los tampones

Te ayudamos a identificar los síntomas de esta alergia que puede aparecer de un día para otro.

Los tampones o tampax significaron un antes y un después en la vida de las mujeres. Gracias a estos artilugios de algodón, las mujeres empezaron a ir a la playa o piscina y bañarse sin miedo de que la prenda de higiene íntima se hinchase o se saliese de lugar.

Aunque muchas veces los encuentras en las mejores promociones de buen fin 2021, aquí estarán los mejores productos de cuidado personal, aprovecha estas mega ofertas que se acercan para ti.

Además ya podían lucir bikinis, bañadores, faldas y pantalones sin miedo de que se viera la compresa o llegasen a manchar algo.

Sin embargo, los tampones pueden no ser siempre los mejores aliados para todas las mujeres.

Si se abusa de ellos pueden llegar a crear problemas para la salud. Por eso, tanto las marcas como los profesionales de salud avisan de cuáles son las normas para utilizar los tampones y qué no debemos hacer.

No obstante, hay mujeres que, aunque utilicen este producto adecuadamente, desarrollan también alergia a los tampones o tampax.

Cómo saber si tenemos alergia a los tampones

Tanto si has utilizado alguna vez este producto como si es la primera vez, estos síntomas te pueden aparecer.

Tras colocarte el tampón sentirás un poco de quemazón en la zona vaginal que hayas rozado con el algodón.

Quizás, en un principio, pienses que sea sequedad y no le des más importancia, pero a medida que vaya pasando el tiempo sentirás picores, irritación y malestar.

Al quitarte el tampón, los síntomas disminuirán, pero si vuelves a colocarte otro en poco tiempo cada vez te sentirás peor.

Si eres alérgica a los tampax, por mucho que pase el tiempo, no vas a poder a volver a utilizarlos sin tener estos molestos efectos secundarios.

Es importante leer las indicaciones de uso.

Por eso, es importante que acudas a tu ginecólogo lo antes posible si crees que estas sufriendo alguno de estos síntomas y tu médico sabrá cual será la mejor solución para tu caso en concreto.

Seguramente te dé alguna medicina para aliviar los dolores del momento y te recomendará no utilizar tampones durante una temporada larga.

A continuación verá si también te dan alergia las compresas y otros productos de higiene íntima.

En caso afirmativo, el ginecólogo decidirá si lo mejor para ti es cambiar de marca y ver si no se repite el resultado o buscar otras alternativas que te sean mejores.

alergia a los tampones

Por qué tenemos alergia a los tampones

Este producto de algodón está ideado para mejorarnos la calidad de vida. Sin embargo, no debemos olvidar que estamos metiéndonos un objeto extraño en nuestro cuerpo y es normal que éste reaccione de forma distinta según la persona o la ocasión.

Los fabricantes y médicos no recomiendan llevar el tampón puesto durante mucho rato, pero hay muchas mujeres que no escuchan estos consejos y hasta duermen con él dentro.

Esto hace que, a largo plazo, nuestro cuerpo desarrolle un modo de defenderse y de demostrarte que algo no va bien.

Los tampones contienen productos químicos para que huelan de un modo determinado, mantengan su forma original y absorban lo necesario.

Aunque las marcas crean cada día productos más desarrollados y beneficiosos para nosotras, es natural que algunas mujeres lleguen a tener alergia a los tampones, como cada persona tiene alergia a una cosa distinta.

Simplemente, una mujer puede tener alergia a los tampones de un día para otro, aunque los haya estado utilizando durante muchos años.

Los factores que hemos nombrado influyen, como el mal uso y la fabricación, pero deberá ser el médico quien dictamine si realmente tienes alergia a los tampones y qué deberás hacer alternativamente a partir de este momento.

Así pues, es una alergia muy común que no tiene porqué afectarte a tu día a día. Lo más importante es que acudas al ginecólogo lo antes posible y dejes de utilizar tampones si sientes sequedad, picores, hinchazón o irritación.

Una vez el profesional haya estudiado tu caso verás si debes dejar de utilizarlos o, simplemente, buscar una marca o método alternativo para poder seguir disfrutando de tu vida sin que la menstruación te pille desprevenida.

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